El fascinante vínculo entre humanos y caninos: así funciona nuestro cerebro cuando estamos con un perro
Investigadores de neurociencia de las universidades de Emory y Harvard, revelan los sorprendentes efectos que tiene la compañía de un perro en nuestro cerebro. revelando detalles fascinantes sobre el vínculo emocional entre humanos y caninos, demostrando cómo nuestra mente responde de manera especial cuando interactuamos con estos fieles compañeros.
Este estudio, analizó el comportamiento cerebral de un grupo de participantes mientras interactuaban con perros. Utilizando imágenes de resonancia magnética funcional (IRMf), los investigadores podrán observar qué áreas del cerebro se activaban durante estas interacciones.
Los resultados fueron asombrosos. Se descubrió que cuando los participantes acariciaban a un perro, se liberaba una cascada de sustancias químicas en el cerebro, como la oxitocina y la dopamina, conocidos por su papel en la generación de sentimientos de felicidad y bienestar. Estas sustancias se liberan tanto en el humano como en el canino, creando así una conexión emocional única entre ambas especies.
Además, el estudio reveló que la simple presencia de un perro puede tener un impacto positivo en nuestro estado de ánimo y reducir los niveles de estrés. Incluso solo mirar una foto de un perro puede activar áreas del cerebro asociadas con la alegría y la empatía.
Los investigadores también observaron que la interacción con perros puede ayudar a mejorar nuestras habilidades sociales. Los participantes mostraron un aumento en la actividad de las áreas cerebrales relacionadas con la empatía y la comunicación, lo que sugiere que los perros pueden desempeñar un papel importante en el desarrollo de nuestras habilidades sociales y emocionales.
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Estas pruebas respaldan lo que muchos dueños de perros han experimentado de primera mano: la presencia de un perro puede brindar un apoyo emocional invaluable. Los perros son conocidos por su lealtad y su capacidad para detectar nuestras emociones, lo que los convierte en compañeros ideales para aliviar la soledad y mejorar nuestra calidad de vida.
Cada vez más instituciones y terapeutas están utilizando perros en programas de terapia asistida con animales para tratar afecciones como la ansiedad, la depresión y el estrés postraumático.
La presencia de estos fieles compañeros desencadena respuestas emocionales y cognitivas que fortalecen nuestro vínculo con ellos. Estos hallazgos subrayan la importancia de valorar y cuidar la relación entre humanos y perros, que no solo nos brindan compañía, sino que también nos brindan beneficios emocionales y mentales significativos.
