¿Imitadores peludos? Investigadores descubren que los gatos pueden imitar a sus dueños
En la era de las redes sociales, no es raro encontrar videos de gatos que parecen imitar a sus dueños de manera sorprendente, e incluso algunos que aparentan cantar. Pero, ¿realmente pueden los gatos imitar a sus dueños? Lo que solía considerarse una simple coincidencia o fruto de la imaginación de los amantes de los felinos, ha comenzado a recibir atención seria de la comunidad científica. Científicos japoneses, especializados en etología animal, han llevado a cabo investigaciones que sugieren que la imitación por parte de los gatos es más que una casualidad.
En sus experimentos, estos científicos estudiaron el comportamiento de un gato japonés llamado «Ebisu», que demostró ser capaz de imitar las acciones que su dueña le enseñaba. Este fenómeno, según los investigadores, había sido documentado en muy pocas criaturas hasta la fecha, lo que sugiere que la imitación podría ser una habilidad que se desarrolló tempranamente en la historia evolutiva de los mamíferos.
Disfruta en el siguiente enlace algunos divertidos momentos de imitación:
El descubrimiento de esta capacidad en los gatos se produjo de manera inesperada mientras Claudia Fugazza, etóloga de la Universidad Eötvös Loránd de Budapest, estudiaba el comportamiento de un perro que había sido entrenado durante una década para copiar acciones a través del método «do as I do» (Haz lo que hago). Esta técnica implica que el animal memorice comportamientos cuando se le dice la frase «Haz lo que hago» y luego los reproduzca cuando se le dice «hazlo». Con el tiempo, el animal asocia «hazlo» con «cópiame», lo que resulta en la imitación precisa de las acciones de su dueño, incluso si no las había memorizado previamente.
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La colaboración entre Fugazza y Fumi Higaki, una adiestradora de perros, condujo al sorprendente descubrimiento de que uno de los gatos de Higaki, un felino llamado «Ebisu», también había sido entrenado con la técnica «do as I do». A pesar de sus 11 años de edad, Ebisu, que vivía en una tienda de mascotas y tenía un fuerte interés en la comida, resultó ser un sujeto de entrenamiento efectivo. El gato demostró la capacidad de copiar acciones familiares, como abrir cajones de plástico y morder cuerdas de goma, pero también pudo imitar comportamientos nuevos, como levantar la mano derecha y tocar una caja o inclinarse y frotarse la cara con un objeto.
Tras repetir el experimento unas 16 veces, Ebisu logró imitar a su dueña con un asombroso 81% de precisión, según informaron los investigadores. Este hecho sugiere que el gato no solo fue capaz de distinguir las partes del cuerpo de su dueña, sino también de realizar las mismas tareas utilizando sus propias extremidades.
A pesar de estos hallazgos, algunos etólogos se muestran escépticos y plantean que este comportamiento podría ser el resultado de la repetición y el aprendizaje, similar a lo que hacen los animales en los circos, en lugar de una habilidad innata. Sin embargo, como Ebisu y otros gatos demuestran en las redes sociales, la imitación de las acciones humanas por parte de los felinos sigue siendo un fenómeno fascinante y curioso.
A medida que continuamos descubriendo más sobre el comportamiento de nuestros amigos felinos, es posible que sigamos sorprendiéndonos con sus asombrosas habilidades y capacidades.
