Los refranes colombianos que no dejan progresar al país
Un estudio que realizó una consultora de Bogotá encontró que algunos de los dichos populares propenden a la excusas y no a la búsqueda de soluciones, lo que limita a las personas
“El vivo vive del bobo”, “Loro viejo no aprende a hablar’ o “Todo niño trae el pan debajo del brazo” son algunos de los refranes populares colombianos que evidencian la validación de excusas en vez de la búsqueda de soluciones y que de acuerdo con un análisis que realizó la firma de consultoría Vera Ikona forman parte de las expresiones populares que frenan el progreso del país.
En dicha observación se señala que el poder de la palabras repercute sobre el cerebro, el órgano que controla a los seres humanos, desde los aspectos físicos hasta los mentales, por lo que el lenguaje, impacta negativa o positivamente a las personas, y entre esas expresiones se encuentran los refranes populares, que en Colombia, en ocasiones, validan comportamientos conformistas que empeoran los problemas que padece el país.PUBLICIDAD
“Las expresiones populares terminan siendo como hábiles, rápidos y resistentes vehículos que transportan de una generación a otra una cantidad de ideas que en la mayoría de los casos sirven como excusas para decir que no tenemos nada que hacer porque la vida es así, y la verdad es que si podemos cambiar”, explicó Constanza Triana, entrenadora mental y directora de Vera Ikona.
Precisamente, julio es el mes internacional del cerebro, según señaló Triana, por lo que una forma para celebrarlo es enfocar el potencial de este órgano en función del aprendizaje y superar las limitaciones que imponen en muchas ocasiones los refranes nacionales.
“Hemos escuchado hasta el cansancio que somos un país con altos niveles de desigualdad, pobreza y desempleo. Solo que también es verdad que somos creadores del primer marcapasos, somos el segundo país más biodiverso del mundo (…) así que tenemos la opción de hacer lo que hacen los buenos atletas: enfocarse en sus oportunidades, entrenar y mejorar sus habilidades en lugar de sentarse a lamentar sus desgracias”, señaló la entrenadora mental.
Triana realizó el siguiente listado de refranes que están limitando la mentalidad de los colombianos:
Loro viejo no aprende a hablar
“Es una idea que limita el desarrollo de la gente y del país porque supone que aprender tiene fecha de vencimiento y la verdad es que todos podemos aprender sin importar nuestra edad”, señala Triana.
Todo niño trae el pan debajo del brazo
“Es una gran mentira, los menores no vienen con pan, ni con arepa debajo del brazo y por pensar de esa manera tenemos a miles de ellos viviendo una infancia desafortunada aguantando hambre, frío, calor, discriminación, entre otras desgracias”, afirmó la entrenadora mental.
Todo tiempo pasado fue mejor
“Pensar de esa manera enfoca toda la capacidad creativa en repetir mentalmente una y mil veces el pasado donde ya no hay nada que hacer y lo más grave, perdiendo la oportunidad de construir el presente y planear el mañana”, refutó.
Árbol que nace torcido, jamás sus ramas enderezan
“Un concepto que niega la capacidad que tenemos todos de tomar conciencia de nuestros actos y asumir un nuevo comportamiento, este refrán desconoce la neuroplasticidad que es la habilidad que tenemos todos de adquirir nuevas destrezas”, comentó.
Perro flaco soñando con longaniza
“Las emociones tienen un papel protagónico en como una persona interpreta su realidad, por eso, si alguien está soñando con un futuro mejor y sus padres, profesores, líderes religiosos o pareja sentimental se burlan al escucharle sin saberlo, dejan una huella emocional negativa que le va a restar autoconfianza y seguridad a esa persona para ir por lo que sueña”, destacó.
Quien bien te quiere te hará llorar
“Ideas como esas en una sociedad que en su mayoría desconoce la inteligencia emocional promueven la peligrosa idea de que las relaciones de pareja son fuente de tortura y sufrimiento cuando deben ser fuente de amor”, subrayó.
El vivo vive del bobo
“Una idea muy nociva porque instala en el cerebro dos ideas perversas. Primera, que ser vivo es aprovecharse de los demás cuando el nombre correcto es deshonesto, y segunda que es de bobos confiar en los demás, cuando es una habilidad vital para el progreso, ya que la confianza es vital en el desarrollo social y empresarial”, advirtió Triana.
Fuente: www.infobae.com