Gobierno anuncia la reapertura de mataderos municipales
El Ejecutivo ha emitido un decreto que marca un giro significativo en la política agrícola y ganadera del país al reabrir los mataderos municipales. A pesar de la perspectiva positiva del presidente Gustavo Petro, quien aboga por fomentar la producción local de carne, existen preocupaciones significativas sobre posibles desafíos en materia de salubridad pública.
La medida, respaldada por el Ministerio de Salud y Protección Social, se sustenta en el Decreto 2016 de 2023, elaborado en conjunto con los ministerios de Agricultura, Comercio, Industria y Turismo, Ambiente y Transporte. El objetivo declarado es contrarrestar el control monopolístico de los frigoríficos y estimular la competencia para reducir los precios internos de la carne.
Según el presidente Petro, la competencia generada permitirá a los campesinos comercializar sus productos y romper con los monopolios que han afectado los costos internos de la carne. El Invima, Instituto Nacional de Vigilancia de Medicamentos y Alimentos, será responsable de autorizar las «plantas de beneficio animal en categoría de autoconsumo».
Sin embargo, las críticas no se han hecho esperar. Javier Guzmán, exdirector del Invima, sostiene que el cierre original de los mataderos se debió al incumplimiento de normativas sanitarias, y el nuevo decreto podría llevar a desafíos similares si no se aplican rigurosas medidas de cumplimiento.
El infectólogo Carlos Agudelo advierte sobre riesgos asociados a la manipulación inadecuada de la carne, que podrían conducir a contaminaciones bacterianas, fúngicas o virales. La Organización Panamericana de la Salud (OPS) también ha expresado inquietudes sobre infecciones parasitarias, zoonosis y septicemias asociadas a los mataderos.
A pesar de estas preocupaciones, algunos expertos sugieren que los mataderos municipales no serán un problema si se cumplen estrictamente las leyes y protocolos desde la muerte del animal hasta el almacenamiento y transporte del producto.
El ministro de Salud, Guillermo Jaramillo, asegura que se implementará una vigilancia rigurosa para garantizar que estos centros cumplan con los reglamentos y condiciones sanitarias. El Decreto 2016 de 2023 establece criterios específicos para la autorización de las plantas de autoconsumo, incorporando disposiciones en verificación microbiológica, análisis de peligros y puntos críticos de control, transporte, normatividad ambiental, ordenamiento territorial, destrucción de decomisos y sistema de refrigeración.
La medida, que busca impulsar la economía local y brindar oportunidades a los pequeños productores, genera un intenso debate sobre cómo se implementarán y controlarán estos cambios en un sector crucial para la seguridad alimentaria y la salud pública.
