Cuitiva y el Lago de Tota, joyas turísticas de Boyacá
Cuitiva, un encantador municipio colombiano ubicado en la provincia de Sugamuxi, en el corazón del departamento de Boyacá, es una verdadera joya turística. Esta pequeña población, situada a unos 85 kilómetros al oriente de Tunja, se encuentra enclavada junto al majestuoso Lago de Tota, ofreciendo un escenario natural impresionante y una riqueza cultural que atrae a viajeros de todas partes.
La historia de Cuitiva se remonta a la época precolombina y, a medida que los años avanzaron, los colonizadores españoles dejaron su huella en el lugar. El nombre Cuitiva, que significa «La tierra de la Esposa del Capitán,» pues según la historia; eran mandados por un cacique o capitán. Esta rica herencia cultural se refleja en las festividades y tradiciones que aún se celebran en el municipio.
Una de las joyas históricas de Cuitiva es su capilla doctrinera, fue la primera iglesia para enseñar la doctrina cristiana se levantó en la esquina en donde hoy queda la capilla del Humilladero. El actual templo parroquial fue construido a comienzos del siglo XVII, ha sido declarada Monumento Histórico Nacional. Tiene un camerin en talla dorada y una estatua en miniatura de la virgen de los dolores. El altar mayor, los artesonados y los cuadros hermosamente trabajados que hay en los costados de nuestra iglesia son obras de arte traídos por los Franciscanos en la época de la colonización española a mediados de 1600.
El casco urbano de Cuitiva, con sus calles empedradas y casas coloniales bien conservadas, es un testimonio de la rica historia del lugar. Este municipio tiene un especial arraigo por la cultura Muisca.
Cuitiva, al igual que otros municipios circundantes, es conocido por su agricultura y ganadería, pero lo que realmente lo destaca es su proximidad al Lago de Tota. El lago es el más grande de Colombia y el segundo lago navegable a mayor altitud de América del Sur, después del Lago Titicaca.
El Lago de Tota es un paraíso natural con aguas turquesas, playas de arena blanca y una gran biodiversidad. Durante siglos, ha sido un sitio sagrado y de adoración para las culturas indígenas de la región. Además, ofrece la oportunidad de disfrutar de actividades como la pesca, la navegación y la observación de aves.
Para llegar a Cuitiva y el Lago de Tota desde Bogotá, puede tomar un autobús a Sogamoso, un viaje que dura aproximadamente 3 horas. Desde Sogamoso, encontrará conexiones de transporte que lo llevarán a Cuitiva y al Lago de Tota. Este destino es ideal para visitar en cualquier época del año y quedara cautivado con su belleza natural y su rica herencia cultural. Sin duda, Cuitiva y el Lago de Tota son tesoros turísticos que merecen ser descubiertos y explorados.