Guardia indígena del Cauca le hacen frente al conflicto armado
Recientemente, la agencia de noticias France24 publicó un informe sobre la comunidad indígena Nasa, ubicada en el Cauca, suroeste de Colombia. Este pueblo se encuentra atrapado en el fuego cruzado del conflicto armado, oponiéndose tanto a la guerrilla como al Ejército (que intenta recuperar la cordillera de manos de los grupos armados). Ante la reanudación del conflicto y el recrudecimiento de la violencia, alrededor de 3,000 guardias indígenas se han movilizado para velar por la seguridad de su comunidad.
El reportaje, realizado por Pascale Mariani, Juan Orozco y Nadège Mazars, nos remonta a un ataque ocurrido el 16 de marzo de 2024, cuando la comunidad intentó rescatar a un joven reclutado por un grupo armado, lo que resultó en el asesinato de una líder indígena. Sin embargo, la comunidad logró repeler a los rebeldes gracias a su gran mayoría, y los guardias indígenas han establecido controles para identificar y someter a los guerrilleros que ingresan a su territorio.
“Desde que se firmó el proceso de paz, nuestro territorio no ha conocido la paz. Aunque se entregaron las armas, en nuestra región nunca ha habido tranquilidad”, asegura Ana Rubiela Quinuapumbo, una de las líderes del pueblo Nasa.
El informe también menciona que tras la firma del acuerdo de paz en 2016, surgieron varios grupos disidentes de las FARC en todo el país. En Toribío, la guerra ha regresado por el control de las montañas del Cauca, enfrentándose al Ejército y a la Policía. Desde hace 20 años, la estación de policía local ha sido blanco de ataques guerrilleros, que se intensificaron en marzo tras el cese al fuego entre el gobierno de Gustavo Petro y las disidencias.
La comunidad Nasa se opone firmemente a la presencia de la guerrilla y de las fuerzas públicas en su territorio, enfrentándose constantemente a la amenaza de represalias por parte de grupos armados ilegales y a su vez han reportado varios asesinatos en la región.
Dentro de su territorio, las comunidades tienen escuelas de guardias indígenas nasa, donde los niños aprenden a manejar el bastón de mando, símbolo de autoridad usado desde la llegada de los conquistadores. La formación de los jóvenes incluye tanto aspectos físicos como dicen ellos mismos “para huir de los enemigos”.
Los líderes comunitarios señalan que la situación actual es más peligrosa, ya que afirman: “No sabemos quién es quién”. La presencia de cultivos de coca y actividades relacionadas con el narcotráfico y la minería ha atraído la atención de los grupos armados. Cada tarde, la guardia indígena refuerza su vigilancia, activando hasta 60 puntos de control durante la noche.
Finalmente el medio concluye el reportaje diciendo que los indígenas Nasa continúan resistiendo en el Cauca, enfrentándose a un conflicto que no les pertenece.
