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La Ley Colombiana de parto digno, respetado y humanizado que, las mujeres desconocen

La aprobación de la ley de parto digno, respetado y humanizado en Colombia en el 2022 marcó un hito en la lucha contra la violencia obstétrica, un fenómeno insidioso, pero frecuentemente ignorado en el ámbito de la atención médica materna.

La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) define la violencia obstétrica como cualquier forma de trato irrespetuoso, abusivo, negligente o de negación de atención durante el proceso de parto y postparto. Esta forma de violencia, que puede ocurrir tanto en centros de salud públicos como privados, tiene como objetivo deshumanizar, discriminar o causar daño físico, psicológico o moral a la mujer.

Las cifras revelan una realidad preocupante. Según las Estadísticas Vitales del Departamento Administrativo Nacional de Estadística (Dane), entre el 2018 y el 2022, más de 779.400 mujeres colombianas entre 20 y 24 años dieron a luz en el país. Sin embargo, detrás de estos números se esconden historias de maltrato y desatención que no siempre salen a la luz.

Desde el 2010, algunos profesionales de la salud, como ginecóloga Susana Bueno, han comenzado a cuestionar las prácticas habituales en la atención al parto y a promover alternativas centradas en el bienestar integral de la madre y el bebé. A pesar de enfrentar resistencia inicial, han logrado abrir espacios de diálogo y concientización en el gremio médico.

El ginecólogo y obstetra Silvio Fernández del Hospital Universitario San José de Popayán destaca la importancia de reconocer la violencia obstétrica como un problema real y generalizado en la sociedad actual. Cree firmemente en que “una manera de nacer amorosamente cambia el futuro de nuestra sociedad”. El testimonio de mujeres que han sufrido maltrato verbal, psicológico y físico por parte del personal médico refuerza la urgencia de abordar este tema de manera integral.

El informe ‘Se robaron mi parto’, presentado por el Observatorio de Salud Sexual y Reproductiva (Huitaca), revela testimonios impactantes de mujeres colombianas que han sido víctimas de tratos irrespetuosos y violentos durante su proceso de gestación, parto y postparto.

La Ley de Parto Digno, Respetado y Humanizado, así como legislaciones similares en otros países latinoamericanos, representa un paso crucial hacia la protección de los derechos de las mujeres durante el embarazo, parto y postparto. Estas leyes garantizan el respeto a la autonomía de las mujeres para elegir sobre su embarazo,el proceso del parto, el lugar en el que desea dar a luz, sus acompañantes y contar con la asistencia de profesionales capacitados en atender partos y apoyar física y emocionalmente a las mujeres.

También se incluye el respeto y la dignidad de las personas que atraviesan un duelo perinatal o la pérdida del bebé. Esta es una realidad en las salas de parto que requiere atención, ya que cada año mueren 2,6 millones de bebés en el mundo durante el embarazo o a pocos días de nacer, según la Organización Mundial de la Salud.

Conocer los derechos para un parto digno, ayudad a combatir la violencia obstétrica, implica un compromiso colectivo de la sociedad y el sector de la salud para promover una cultura de respeto, dignidad y atención integral en el proceso de maternidad.

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