León XIV: el primer Papa estadounidense que marca un nuevo rumbo en la Iglesia Católica

Robert Francis Prevost, nacido en Chicago y con raíces peruanas, fue elegido como el Papa número 267 tras un cónclave breve pero decisivo.
El 8 de mayo de 2025, la Plaza de San Pedro estalló en júbilo al anunciarse la elección de un nuevo pontífice. La fumata blanca emergió de la Capilla Sixtina, señalando la elección de Robert Francis Prevost como el nuevo líder de la Iglesia Católica, quien adoptó el nombre de León XIV. Este acontecimiento histórico marca la primera vez que un estadounidense asume el papado, sucediendo al Papa Francisco, fallecido el 21 de abril de 2025.
El cónclave, iniciado el 7 de mayo con la participación de 133 cardenales electores, concluyó en menos de 24 horas tras cuatro rondas de votación. La elección de Prevost fue anunciada oficialmente a las 19:13 horas locales por el cardenal protodiácono Dominique Mamberti, quien proclamó el tradicional «Habemus Papam» desde el balcón central de la Basílica de San Pedro. (Cónclave de 2025
Prevost, de 69 años, nació en Chicago y posee también la nacionalidad peruana. Su trayectoria incluye más de cuatro décadas de servicio en Perú como misionero agustino y obispo, lo que le ha conferido una perspectiva pastoral cercana a las comunidades marginadas. Antes de su elección, desempeñó el cargo de prefecto del Dicasterio para los Obispos y presidente de la Comisión Pontificia para América Latina.
Al presentarse ante los fieles, León XIV lució la muceta roja y la estola de los apóstoles, símbolos tradicionales que no se veían desde el inicio del pontificado de Francisco. En su primer mensaje, ofrecido en italiano y español, expresó su compromiso con la paz y el diálogo, y rindió homenaje al legado de su predecesor.
La elección de León XIV ha sido interpretada como una señal de continuidad con las reformas iniciadas por Francisco, especialmente en temas de justicia social y derechos humanos. Su perfil combina una sólida formación teológica con una sensibilidad hacia las periferias, aspectos que podrían definir su pontificado en los próximos años.
La elección de León XIV representa un momento significativo en la historia de la Iglesia Católica, al combinar tradición y renovación. Su liderazgo será observado de cerca por fieles y líderes mundiales, quienes esperan que continúe fortaleciendo los lazos entre la Iglesia y las comunidades globales, promoviendo valores de inclusión, justicia y paz.