Dos municipios de Boyacá, superan registros históricos de temperaturas altas
Desde hace treinta años, el Instituto de Hidrología, Meteorología y Estudios Ambientales (Ideam) viene monitoreando y registrando las temperaturas que se presentan en el país durante los distintos meses, semanas y días, lo que les permite conocer cuándo estas se están comportando fuera de lo normal.
Por ello el Instituto de Hidrología, Meteorología y Estudios Ambientales (Ideam) ha alertado sobre un fenómeno preocupante en Colombia: veintinueve municipios han superado sus registros históricos de temperaturas durante este mes de enero, en medio de un escenario influenciado por el cambio climático y el fenómeno de El Niño. La temperatura del aire en superficie no es estática. No permanece estable durante los días, las semanas y los meses
Según Tatiana Sierra, jefa de la Oficina del Servicio de Pronósticos y Alertas del Ideam, estas altas temperaturas están fuera del rango normal para esta época del año. El pasado 24 de enero, Jerusalén, Cundinamarca, marcó un récord con una temperatura de 40,6 °C, la más alta jamás registrada para un mes de enero en ese municipio.
Bogotá, la capital colombiana, también ha sido afectada por este fenómeno. El 25 de enero, la ciudad alcanzó una temperatura récord de 25,2 grados, un pico histórico que evidencia la magnitud del impacto del cambio climático en la región.
Otros municipios que han superado sus registros históricos incluyen a Santa Marta (36,9 °C), Neiva (39,2 °C), Montería (38,1 °C), Medellín (33,7 °C), Urumita (38,6 °C), Abrego (32,8 °C), Lebrija (31,4 °C), Guadalupe (31,2 °C), Capitanejo (40,4 °C), Gámbita (28,8 °C), Mogotes (31,3 °C), Santa Sofía (27,6 °C), Paipa (29 °C) y Buenavista (24,6 °C).
También en la lista están Mosquera (25 °C), Pandi (35,8 °C), Tuluá (24,2 °C), Villahermosa (25,6 °C), Colombia (30,6 °C), Neiva (39,2 °C), Puracé (26,2 °C), Caldas (29,3 °C), Bello (35,2 °C), Rionegro (26,4 °C), Medellín (33,7 °C), Samaná (28,2 °C), Sahagún (38,8 °C), Montería (38,1 °C), San Andrés (32 °C) y Providencia (31,3 °C).
Estas cifras alarmantes reflejan la gravedad del fenómeno y sus consecuencias para la población y el medio ambiente, planteando serios desafíos, como el riesgo de incendios forestales, la escasez de agua y los impactos en la salud de las personas. Además, evidencia la necesidad urgente de tomar medidas para mitigar el cambio climático y adaptarse a sus efectos.
