Australia considera establecer una edad mínima para el acceso a redes sociales
Australia está evaluando la implementación de una edad mínima para que los niños y adolescentes puedan acceder a las redes sociales. Según el primer ministro Anthony Albanese, esta edad podría oscilar entre los 14 y los16 años.
No es un secreto que las redes sociales pueden tener un impacto negativo en la salud mental de los jóvenes. Por ello, se está considerando esta medida para proteger a los menores y limitar su acceso a estas plataformas.
En Colombia, el concepto de «nomofobia» describe la adicción creciente al celular, en gran parte atribuida a las redes sociales. Este fenómeno se manifiesta en comportamientos como el ‘phubbing’, que es la incapacidad de dejar el celular durante una conversación, el pánico por quedarse sin batería, la frustración o soledad por no tener el celular cerca, y la irritabilidad por no tener señal.
Una encuesta realizada por la Asociación de la Industria de Telecomunicaciones (Asomóvil) revela que el 79% de los colombianos tienen una fuerte conexión emocional con su celular. Además, el 15% de los encuestados creen que usan demasiado su teléfono durante reuniones familiares, aunque el 85% no tiene intención de reducir su uso. Es fundamental tener un mejor control del tiempo dedicado a las redes sociales y aprender a utilizarlas como una herramienta que mejora la calidad de vida, en lugar de una forma de ocio.
La medida propuesta en Australia busca mejorar la salud mental de los jóvenes. Aunque la edad mínima exacta aún está por definir, Albanese estima que debería estar entre los 14 y los 16 años. El parlamento australiano prevé aprobar la ley correspondiente este año.
Albanese ha calificado a plataformas como TikTok, Instagram y Facebook como «un azote» para los menores de edad. Aunque no se ha especificado cómo determinará la edad de los usuarios a la hora de conectarse, el gobierno australiano está explorando diferentes métodos para verificarla.
El objetivo de la medida es proteger a los menores de la influencia potencialmente dañina de las redes sociales y asegurar que puedan disfrutar de su niñez sin ser afectados por estas.