¿Cuánto puede vivir un gato criado en casa?

Los gatos domésticos se han ganado un lugar privilegiado en millones de hogares, no solo por su carácter independiente y juguetón, sino también por la profunda conexión que generan con sus dueños. Sin embargo, una pregunta frecuente entre amantes de los felinos es: ¿Cuánto puede vivir un gato criado en casa?
Un felino criado en familia puede alcanzar entre 12 y 18 años de vida, e incluso superar los 20 si recibe atención y un ambiente seguro.
De acuerdo con expertos veterinarios, la esperanza de vida de un gato doméstico suele ubicarse entre 12 y 18 años, aunque no es raro encontrar ejemplares que superan las dos décadas. El secreto para alcanzar esa longevidad está en una combinación de cuidados médicos, alimentación adecuada y un entorno protegido.
Los factores determinantes incluyen:
- Atención veterinaria regular: chequeos anuales, vacunación y desparasitación previenen enfermedades comunes y graves.
- Nutrición de calidad: una dieta balanceada, ajustada a la edad y necesidades del gato, evita problemas como la obesidad o deficiencias nutricionales.
- Vida en interior: los gatos que viven dentro de casa están menos expuestos a accidentes, peleas y enfermedades transmisibles.
- Esterilización: además de controlar la población felina, reduce el riesgo de ciertos cánceres y conductas peligrosas.
- Ambiente seguro: Mantenerlos dentro de casa o en espacios controlados disminuye el riesgo de accidentes, intoxicaciones y enfermedades infecciosas.
- Estimulación mental y física: Juguetes, rascadores y momentos de juego diario ayudan a prevenir el estrés y la obesidad.

En contraste, los gatos que viven en la calle suelen tener una expectativa de vida mucho menor, de 4 a 6 años, debido a la falta de cuidados, peligros ambientales y enfermedades como la leucemia felina o el virus de inmunodeficiencia felina.
Criar un gato en un ambiente familiar responsable no solo prolonga su vida, sino que garantiza que esos años se vivan con salud y bienestar. Con cariño, alimentación adecuada y revisiones periódicas, un felino puede convertirse en un compañero de aventuras y afecto durante más de dos décadas.