En riesgo cancelación del semestre en la Universidad Nacional
La Universidad Nacional de Colombia enfrenta una crisis significativa con semanas de protestas desencadenadas por el nombramiento de José Ismael Peña como rector. Estas manifestaciones han provocado un paro de casi siete semanas, poniendo en riesgo la continuidad del semestre actual.
Las protestas comenzaron casi inmediatamente después de la elección y nombramiento de Peña, iniciando formalmente en la octava semana del semestre. En la sede de Bogotá, las manifestaciones han sido intensas en todas las facultades, y aunque otras sedes también han visto protestas, la intensidad varía. Ahora, en la décimo cuarta semana del semestre, el paro continúa, generando preocupación entre académicos y estudiantes sobre la posible cancelación del semestre.
Aunque la cancelación del semestre es una opción, la Universidad Nacional ha evitado tomar tal medida en el pasado, incluso ante alteraciones significativas en el calendario académico. Sin embargo, la duración del paro, iniciado tan temprano en el semestre, plantea un desafío inusual. Con el semestre programado para finalizar el 1 de junio, quedan apenas dos semanas, lo que hace improbable la recuperación de las semanas perdidas.
El calendario académico estipula que el 25 de julio es la fecha límite para el “Bloqueo y reporte de pérdida de calidad de estudiante por causas académicas del periodo 2024-1I”, y las vacaciones de los profesores del 5 al 19 de julio, según la resolución 4 de 2024 de la Rectoría, impiden la posibilidad de clases durante ese período. Esto reduce aún más el tiempo disponible para reponer las actividades académicas suspendidas.
Una alternativa podría ser el aplazamiento del semestre para concluirlo después del paro, lo que requeriría modificaciones en el calendario académico de todas las
sedes. Esto significaría iniciar el segundo semestre más tarde y posiblemente extenderlo hasta diciembre o incluso los primeros meses de 2025. Sin embargo, actualmente, el paro sigue manteniéndose con fuerza, dejando el futuro académico de la Universidad Nacional en una situación incierta.
