Barón va bien y no es para aflojar

Por Juan Carlos Avella

El alcalde de Sogamoso, Mauricio Barón Granados, parece tenerlo claro y, en apenas cinco meses, suma varios logros significativos que demuestran autoridad y ganas de hacer las cosas bien.

Si bien es apenas el comienzo de las administraciones departamentales y municipales del país, el resultado para la mayoría de ellos es de espera, promesas y expectativas. Sin embargo, el alcalde de la Ciudad del Sol ha demostrado que es posible trabajar con resultados en este escaso tiempo.

Al asumir su cargo, Barón se encontró con un Sogamoso desordenado, sucio y sin control, producto del desinterés y poca eficiencia administrativa de su antecesor, Rigoberto Alfonso. Bastaba con dar una vuelta por la carrera 11 para encontrarse con un cúmulo de negligencias y falta de autoridad, lo que imposibilitaba dar una mano a los ciudadanos que debían convivir y soportar todo tipo de intromisiones al comercio organizado y la invasión del espacio público.

Bastaba tratar de visitar la plaza de mercado para toparse con la realidad que afeaba todo lo que se traía por allí. Pretender comprar significaba soportar el desorden, la suciedad y el abuso de ciertos personajes que se habían adueñado de los espacios y paseaban sin problema, por encima de las normas, de los compradores y todo en convivencia con la misma falta de autoridad que desde el despacho municipal se había hecho habitual.

Mauricio Barón arrancó su gestión entre grandes interrogantes y enormes deseos por la tarea inmensa que está pendiente, y las dudas que se generaban sobre su independencia para gobernar, luego de las reuniones que el entonces candidato sostuvo con reconocidos políticos, algunos de cuestionada trayectoria, y que pudieron haber influido en su apoyo para alcanzar el primer cargo de Sogamoso. Sin embargo, el ahora alcalde Barón ha sorprendido con lo logrado en estos primeros meses de su administración.

Se recobró la plaza de mercado, y ahora es posible circular sin mayor inconveniente en busca de productos, encontrando espacios mejor administrados, más limpios y respetuosos con el ciudadano, donde se puede tomar un vehículo de transporte en las calles vecinas sin el caos de antaño. Esto genera confianza y seguridad para atraer inversión en los pequeños comercios de cientos de familias de la región. Se necesitaba autoridad y confianza, y Barón lo logró.

La carrera 11 hoy tiene otra cara: se retomaron los espacios públicos para el peatón, se controlaron los vendedores que inundaban las cuadras, y la autoridad policial y administrativa verifica la legalidad, dejando esta arteria vial como el corredor de mayor importancia para la circulación de Sogamoso. Otra vez, Barón quiso y pudo.

Entre los mayores logros del alcalde Barón se destaca que haya tenido autoridad alguna en los últimos tiempos en Sogamoso: haber gestionado y logrado un acuerdo con el gobierno nacional, mediante el cual las instalaciones de la Clínica Julio Sandoval Medina volverán a prestar servicios a los habitantes de la ciudad. El ministro de Salud, Guillermo Jaramillo, hizo oficial el anuncio de la entrega de las instalaciones al municipio de Sogamoso para su reapertura y atención de pacientes.

Mediante un acuerdo entre la Central de Inversiones S.A. (CISA), propietaria del inmueble, la Administración Municipal y la ESE Salud Sogamoso, esta última se encargará de administrar la clínica para brindar servicios primarios inicialmente, en alrededor de tres meses mientras se realizan algunas adecuaciones locativas. Si a esto se le suma el arreglo de separadores viales que ya ha comenzado y muestran una cara decente y organizada de la ciudad, hay esperanza para sus ciudadanos.

Bajo la carta de navegación aprobada en el Concejo, como es el Plan de Desarrollo, (primero en Boyacá) se permitirá al alcalde Mauricio Barón Granados adelantar las tareas, muchas y de magnitud, sin dilaciones y con el apoyo de sus coterráneos que han visto en corto tiempo, carácter, autoridad y poco ego del mandatario, que sin aspavientos va mostrando su decisión de no pasar como sus antecesores y lograr que Sogamoso respire futuro y no solo el drama de las mil necesidades pendientes. Barón va bien y no es para aflojar.