Escasez de enfermeros agrava la crisis del sistema de salud en Colombia
Colombia enfrenta una crisis severa en su sistema de salud debido a la creciente escasez de enfermeros. Con menos de 10 enfermeros por cada 10,000 habitantes, el país está muy por debajo del estándar internacional de 100 por cada 10,000. Esta deficiencia se ve exacerbada por la migración de profesionales hacia países que ofrecen mejores oportunidades laborales y de desarrollo, como Estados Unidos y España.
En los últimos años, cerca de 3,000 enfermeros y enfermeras colombianos han emigrado a destinos como Estados Unidos, Canadá, España, Alemania y Australia. Esta tendencia, confirmada por datos del Ministerio de Salud, refleja una crisis global en el sector, donde tanto países desarrollados como en desarrollo enfrentan una demanda insatisfecha de enfermeros.
La migración de estos profesionales está afectando gravemente la capacidad del sistema de salud colombiano para atender las necesidades de la población. La falta de personal cualificado no solo aumenta la carga de trabajo para los enfermeros que permanecen, sino que también puede impactar negativamente en la calidad de la atención, especialmente en regiones con una escasez crítica de personal.
Dedsy Berbesi Fernández, decana de la Universidad CES, destaca que esta crisis no es exclusiva de Colombia, sino que también afecta a otras naciones de América Latina y el mundo. La situación subraya la necesidad urgente de mejorar tanto la formación como la retención de enfermeros a nivel nacional e internacional. Aunque Colombia tiene el potencial de formar enfermeros capacitados para el mercado global, es crucial que el país también trabaje en mantener a estos profesionales dentro de su territorio.
En respuesta a esta crisis, el Consejo Internacional de Enfermeras ha solicitado a los líderes del G20 que implementen medidas para promover la autosuficiencia en los sistemas de salud y evitar la migración excesiva de talento desde países con necesidades críticas. Este llamado busca garantizar que países como Colombia puedan retener a sus profesionales de salud y fortalecer sus sistemas sanitarios para enfrentar futuras demandas.
