¿Por qué jugar con tu gato con las manos, es peligroso?

En los últimos años, han aumentado más las personas que adoptan gatos, por compañía y para tener un peludito que les dé mucho amor.

Los gatos son animales adorables y juguetones, pero como dueño de un felino, es importante comprender cómo interactuar de manera segura con ellos para evitar lesiones y fomentar una relación armoniosa.

Los gatos, especialmente cuando son cachorros, son curiosos, llenos de energía y disfrutan del juego. Jugar con ellos es esencial para satisfacer sus necesidades de diversión y estimular su instinto cazador. Algunos buscan jugar con las manos, porque no tienen nada más al alcance. Sin embargo, esta práctica no es buena por muchas razones. Según indicaron los expertos en el tema, más del 22 % gatos que son agresivos, han jugado con las manos de sus dueños.

Los expertos sugieren jugar con los gatos durante al menos 30 minutos al día, siguiendo una rutina constante y utilizando juguetes seguros.

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De igual forma, uno de los consejos principales que los expertos ofrecen, es evitar usar las manos o los pies como juguetes. Aunque los mordiscos y arañazos de los gatitos pueden parecer tiernos y juguetones, esta práctica puede convertirse en un problema una vez que los gatos crecen, pueden lesionarnos con mordeduras y arañazos. Además, los gatos pueden transportar bacterias en sus bocas, lo que aumenta el riesgo de infección en caso de una herida.

Por ello, se recomienda emplear juguetes diseñados específicamente para gatos, como cañas de pescar o pelotas. Esto ayudará a que los gatos comprendan que las manos son para acariciar, no para atacar. Este enfoque es esencial para mantener una relación segura y afectuosa con tu mascota.

Enseñar a los gatos a no jugar con las manos contribuye a que los felinos no vean a las personas como presas. Esto es fundamental para que, en situaciones en las que sea necesario manipular al gato, como para revisarlo o administrar medicamentos, no se sientan amenazados ni se vuelvan agresivos.

En resumen, jugar de manera segura con tu gato es esencial para prevenir lesiones y mantener una relación positiva. Utiliza juguetes adecuados y evita el juego brusco con las manos. De esta manera, se podrá disfrutar de momentos de diversión sin riesgos, recuerda: “No existen los gatos agresivos, la comunicación agresiva hacia personas no es natural en ellos, sino que es aprendida con los humanos”.

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