Flossie, el felino centenario: La historia del gato más longevo
En el mundo de las mascotas, hay historias que desafían las expectativas y capturan la imaginación. Una de ellas es la de Flossie, el gato más viejo del mundo, que ha alcanzado la impresionante edad de 27 años, su edad equivale a 120 años humanos, según confirmó el Libro Guinness de los Récords en noviembre de 2022.
Flossie, una gata de pelaje negro y ojos amarillos, vive en el Reino Unido y ha logrado lo que pocos felinos han conseguido: superar casi tres décadas de vida. Nacida en 1995, Flossie ha vivido en varios hogares y ha sido testigo de innumerables cambios, manteniendo siempre su espíritu curioso y vivaz.
La longevidad de Flossie se atribuye a una combinación de factores, incluyendo una dieta balanceada, atención veterinaria regular y un ambiente lleno de amor y cuidado. Sus dueños actuales, quienes la adoptaron de un refugio, aseguran que, a pesar de su avanzada edad, Flossie mantiene un buen estado de salud general, aunque su audición y visión están disminuidas.
El récord anterior lo tenía un gato llamado Cream Puff, que vivió 38 años y 3 días en Texas, Estados Unidos. Aunque Flossie aún no ha alcanzado esa marca, su historia sigue siendo una inspiración y un recordatorio del increíble potencial de longevidad de los gatos cuando se les brinda el cuidado adecuado.
La esperanza de vida de un gato doméstico suele oscilar entre 12 y 15 años, por lo que el caso de Flossie es realmente extraordinario. Estos felinos pueden vivir más tiempo si reciben una alimentación adecuada, atención médica preventiva y un entorno seguro y amoroso.
La historia de Flossie no solo es un testimonio de longevidad, sino también un ejemplo de la importancia de la adopción responsable y del compromiso a largo plazo que implica tener una mascota. Su vida nos recuerda que con el cuidado y el amor adecuados, nuestros compañeros animales pueden acompañarnos durante muchos años, brindándonos alegría y compañía invaluables.
