Tamsa – Cecilia Jiménez de Suárez – #DomingosDeCuentosyPoesías

TAMSA
( En lengua chibcha: tributo)

Vengo del hombre milenario, abierto al futuro,
amante de la vida y de la muerte,
sacrificio y ofrenda, peldaño hacia la cúspide,
enigma  guardado en  la redoma de los siglos,
espíritu purificado en el ara del ritual,
sabiduría  moldeada en  los crisoles
de la herencia, la intuición y la inventiva,
sello indeleble en el rostro tutelar de la piedra.

¡Mas hoy,
inmersa en la mezcla sin forma
de extrañas  vivencias que arrollan al mundo
en oposición  a la claridad de aquel origen,
siento que soy eslabón obligado
en la cadena de palabras, sonidos y costumbres
contrarios a la naturaleza, negación de valores
y caos ideológico, tecno-químico e infrahumano
de la velocidad, la contaminación y la violencia!

Cuando escapo de la breña de la modernidad
y me refugio en la página ancestral,
para buscar la razón o sinrazón
de la vulnerabilidad o eternidad de la existencia,
encuentro el testimonio de lo inmutable,
en los signos sagrados de la indianidad,
fervor religioso en los adoratorios,
plegarias a las divinidades,
códices ideográficos o defensivos
y conmemoraciones,
grabados en la perpetuidad del jeroglífico.

Entonces, deseo, sueño y me pregunto
si en el círculo misterioso de la supervivencia
querrá y podrá el hombre
volver a la naturaleza y al espíritu;
así como hoy intenta
salvar el agua de la contaminación,
reconstruir las células humanas
y defender la subsistencia
de los animales y las plantas.

Si logrará restituirle a la vida su poder natural,
sentirse hijo del agua y de la tierra
y postrarse,  otra vez, ante la presencia de Dios
manifiesta en los enigmas del cosmos,
la vida y la muerte.

QUIEN PUDIERA CREER EN TUS PALABRAS
¡Quien pudiera creer en tus palabras
palomas fugitivas que se escapan
en la noche  plateada del silencio!

Quien pudiera al volar por los recuerdos
detener los ensueños
y regresar a ti, como regresa el agua
a la tierra reseca, cuando llueve
y logra que la primavera florezca
bajo los rayos de la luna
que sueña entre dorados rayos
aún estando rodeada de luceros.

Quien pudiera lograr que te gritaran los recuerdos
colándose en tu alma como se cuela el viento
por entre los aleros brillantes de misterio.
Quien pudiera convertirse en aire
y llegar al juncal de tus cabellos
que a veces se levantan y otras caen
sobre tu pensamiento.

Quién pudiera, ahora mismo,
llegar a tu canción o a tu silencio
como llega la luz por las mañanas
al tiempo que los gritos de los gallos
cuentan las horas quietas,
que se paran al paso refulgente
de las  estrellas.

Quien pudiera, alma mía
saber si estas dormido, saber si te despiertas
y saber en qué piensas o cuáles son tus sueños.

¿Has soñado despierto alguna vez?
¡Yo siempre, tantas veces!
Y en lánguido silencio,
has visto que aparecen los luceros
para que tu camino sea
como los ríos plateados del recuerdo?

Quisiera ver ahora en qué mundos te encuentras…
Acaso contemplando la luna,
que esta noche está enorme
en su eterno desvelo,
o entre copas, sonriendo,
o, ¿Tus ojos detiénense asombrados
en las páginas grises de algún extraño libro
que imagino poblando tu silencio?.

¡No importa donde estés,
mi pensamiento vuela ti en mi recuerdo
¡Sueña, ríe,  lee, bebe, no importa lo que hagas
si estás en mi ensueños.

Adeizagá

Los escritores interesados en participar en este espacio dominical, deben enviar sus trabajos a nombre del escritor, Fabio José Saavedra Corredor, al correo: [email protected]. La extensión del trabajo no debe exceder una cuartilla en fuente Arial 12. El tema es libre y se debe incluir adicionalmente una biografía básica (un párrafo) del autor.

Los criterios de selección estarán basados en la creatividad e innovación temática, el valor literario, redacción y manejo del lenguaje y aporte de este a la cultural regional.

Todos los domingos serán de Cuento y poesía, porque siempre hay algo que contar.

Fuente:boyaca7dias.com.co