Las ciruelas pasas, son una opción sabrosa y saludable para incorporar a la dieta diaria. Además de su dulzura y textura inconfundibles, ofrecen múltiples beneficios para la salud. A continuación, se destacan algunos de sus efectos positivos.

Actúan contra el estreñimiento: Las ciruelas pasas son altas en fibra y sorbitol, lo que ayuda a mejorar el funcionamiento intestinal y combatir el estreñimiento, según un artículo publicado en 2011 en la revista *Alimentary, Pharmacology & Therapeutics*.

Contribuyen a regular el colesterol y la diabetes: Gracias a su alto contenido de fibra, estos frutos ayudan a regular los niveles de colesterol y azúcar en sangre, beneficiando tanto la salud cardiovascular como el control de la diabetes.

Reducen las posibilidades de algunos tipos de cáncer: Un estudio de 2015 realizado en la Conferencia de Biología Experimental de Boston sugiere que las ciruelas pasas pueden ayudar a prevenir ciertos tipos de cáncer, gracias a su contenido de fibra y su capacidad para retener bacterias intestinales beneficiosas.

Protegen los huesos: Las ciruelas pasas contienen boro, un mineral esencial para la salud ósea, que puede ser beneficioso para personas con riesgo de osteoporosis.

Previenen el deterioro asociado con la edad: Estos frutos secos son ricos en vitaminas A, B2, B3, B6 y minerales como potasio, hierro, cobre, manganeso, magnesio y fósforo, lo que ayuda a mantener una salud óptima a medida que envejecemos.

¿Cómo consumir las ciruelas pasas?

La recomendación es ingerir pequeñas porciones diarias, de entre 50 y 100 gramos, ya que son alimentos muy calóricos y ricos en fibra. Pueden consumirse solas, en yogur con avena u otros cereales, en jugos naturales, mermeladas endulzadas de forma natural o como salsas para aderezar carnes.

Estas sugerencias son orientativas y deben complementarse con una consulta profesional. Para aprovechar al máximo sus beneficios, es esencial incluir las ciruelas pasas en una dieta equilibrada y saludable.